Light my fire

ELIANE ELIAS. DESATANDO NUDOS

[xrr rating=8.5/10]

“La bossa nova puede atarte demasiado”, explicaba la artista brasileña en una entrevista a los medios. Y es que en éste, su último trabajo, la vocalista-pianista de Sao Paulo intenta desatar muchos de los nudos que la han acompañado a lo largo de su carrera. Lazos que la han hecho crecer como artista, para erigirse como uno de los estandartes de la escena jazzística internacional.

 A modo de cuarteto, Eliane presenta ‘Light My Fire’ como una oda a la elegancia. Su voz no necesita de grandes recursos técnicos ni rango vocal para contarnos con absoluta solvencia cada una de las 12 historias que conforman el disco. Eliane acaricia con su voz cada una de las notas que vocaliza, embriagando el espacio musical de una sensación melancólica pero esperanzadora, elegante pero vitalista. Puede que no sea nada que no supiéramos, pero en esta ocasión hay una gran diferencia. Eliane marca distancia con el jazz mas ortodoxo de anteriores trabajos, como ‘Something for you’ – valiente homenaje a Bill Evans – , para acercarse a la música pop brasilera e internacional.

 El exquisito cuarteto, conjunción de experiencia y juventud, da forma a excelentes arreglos con pasmosa elocuencia. Marc Jonshon al contrabajo saca a relucir sus galones para crear una perfecta transición de la base rítmica de Rafael Barata, con la armonía del piano y la guitarra de Eliane y Rubens de LaCorte. Como resultado, tenemos un sonido elegante y sólido, que recuerda al impecable engranaje de un reloj suizo.

 Clásicos como ‘Rosa Morena’ o ‘Isto Aqui O Que É’ se empapan de la personalidad que Eliane les imprime. Composiciones que respiran y reviven bajo las improvisaciones a piano de la diva de Sao Paulo. Y es que el piano de Eliane emociona con cada una de las energéticas y vitalistas frases que interpreta. Parece que la madurez de la Paulista le otorga una contención y criterio que quizás, y solo quizás, en algún que otro de sus anteriores trabajos cojeaba. Eliane también se atreve con clásicos del pop como ‘Light My fire’ de The Doors, o ‘My Cherie amour’ de Wonder, sin llegar a calar tanto como en su parcela brasilera, pero sí dándole un sano toque heterodoxo a la sonoridad del álbum.

 Y si algún ingrediente le faltaba a esta sabrosa ensalada, es el de la voz del maestro Gilberto Gil, que colabora en tres canciones imprimiendo la alegría y magia brasilera que siempre atesora. La colaboración del mítico compositor y cantante de Salvador de Bahía no hace mas que redondear un disco que ya de por sí es una obra muy completa. Disco muy apetecible de degustar a fuego lento y de forma relajada, como se degusta un buen Oporto al atardecer en cualquier bonita playa, con la música de Eliane Elias sonando de fondo, cómo no…

Texto: Alex Pérez Medina